El deporte tiene el poder de trascender
barreras, promover la salud y el bienestar, mejorar la autoestima y enseñar
habilidades para trabajar en equipo y perseverar en la conquista de las metas
que nos proponemos alcanzar. Sin embargo, el acceso de las mujeres al ámbito
deportivo, además de haber sido tardío, ha estado repleto de dificultades. Ellas,
lamentablemente, se han visto obligadas a superar obstáculos creados
por estereotipos sociales y culturales
que dificultan sus posibilidades a la hora de ampliar perspectivas y vislumbrar
nuevos horizontes.
La situación actual de la mujer en el
mundo en general, y en el deporte en particular, nos demuestra que todavía
queda un largo camino por recorrer antes de lograr una equidad real y efectiva. Las niñas
y mujeres obtienen menos oportunidades, menor inversión, capacitación y
seguridad cuando practican un deporte, y cuando consiguen llegar a ser
profesionales, se encuentran con un techo de cristal y una brecha sustancial y
desproporcionalmente injusta tanto a nivel salarial como en lo que a su reconocimiento
público y mediático se refiere.
Por esta razón, en el Día Internacional de la Mujer queremos
destacar los logros notables, las trabas constantes y el inigualable potencial
de las mujeres y las niñas. Para ello, hemos organizado una exposición con la
que pretendemos rendir homenaje y dar visibilidad
a esas grandes mujeres que ya forman parte de la historia del deporte en muchas
y diferentes disciplinas.
Evidentemente, hemos tenido que hacer una selección para elaborar una lista que no resultase infinita, motivo por el cual no están todas las que son, pero sí aquellas
que con sus experiencias, de ayer y de hoy, han contribuido a la lucha por la
igualdad de género, la no discriminación, la libertad y los derechos de la
mujer.
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